jueves, 19 de noviembre de 2009

Noviembre dulce...


Novembre de vieillesse...

No te tomes la vida en serio, al fin y al cabo no saldrás vivo de ella...

¿Quién dijo que era fácil la convivencia con amigas?...
Habrá muy buenos momentos, habrá mucho cariño, habrá muchas cosas buenas...
pero lo que joden después las malas... las distintas maneras de pensar, las prisas, la dejadez, las cosas mal hechas, las malas manías...

El cansancio hace que esas pequeñitas cosas se hagan más grandes, se vayan acumulando, acumulando y acumulando hasta que llega un día en que todo te desborda y por no crear un mal ambiente te lo vuelves a guardar y te encierras en tu habitación, en tu mundo... que sin darte cuenta ya llevas así una semana, y dices... el finde descanso y ya estaré de mejor humor, pero sigue la siguiente semana y vuelves a estar cansada porque te mueres de sueño, porque tantas cosas por hacer... sin tiempo, hacen que te apetezca todo mucho menos... y vuelves a estar irritable...

Luego te pones triste, te pones melancólica... sólo quieres volver a casa, sólo quieres verle, sólo quieres estar sola...

A veces te sientes sola en un mundo que te preguntas si es el tuyo...

Y sin ser eso suficiente, te empiezan a tratar distinto, te esquivan, están distantes... Hasta que tienen una charla contigo... y qué? la liamos o lo arreglamos? Obvio, tranquilízate!

Pones de tu parte, pones fuerza de voluntad, te callas y esperas que todo vaya mejor.
Irá mejor?

Es mejor aprender a pasar de muchas cosas sin que te toquen la fibrilla, así muy superficialmente...

Al fin y al cabo, son tus amigas, sólo son unos meses... Tienes más cosas importantes de las que preocuparte...